MásMóvil cede mercado ante otras operadoras en su batalla contra Telefónica, Vodafone y Orange
El ritmo con el que MásMóvil está ‘robando’ clientes a las tres grandes operadoras del país, Telefónica, Vodafone y Orange, se está ralentizando en los últimos trimestres, lo que explicaría para algunos expertos del sector los últimos movimientos de la compañía: la compra de Euskaltel y su apuesta por la comercialización de electricidad. Los datos muestran que otros operadores más pequeños, como la rumana Digi, están ocupando su lugar y le están robando parte del pastel.
Como se ve en los gráficos, otros Operadores Móviles Virtuales (OMV, color gris) están aumentando el porcentaje de clientes que ‘roban’ a Telefónica, Vodafone y Orange. En julio y agosto alcanzan el 65%, mientras que MásMóvil -en color amarillo- se ha llevado el 17% de los clientes que han perdido las tres grandes. Hace dos años ese porcentaje estaba en el 56%, según datos obtenidos de la CNMC.
Hasta el segundo trimestre del año, cuando aún no había comprado Euskaltel, el porcentaje de clientes ganados por la operadora amarilla fue el 21%, frente al 55% de sólo un año antes. El motivo es la agresiva campaña comercial de otras comercializadoras, que han castigado a MásMóvil, porque la pérdida de clientes de las tres grandes sigue en cifras similares, como se ve también en el gráfico.
Banda ancha
En cuanto a la banda ancha la situación es similar. En este caso el índice clave a analizar es el de las altas netas por operador, que muestra la capacidad de crecer puesto que muchos movimientos entre operadores se realizan sin portabilidad del número fijo.
Teniendo en cuenta todas las altas netas del mercado de banda ancha exceptuando los tres grandes operadores, se comprueba que MásMóvil va perdiendo su capacidad competitiva y de crecimiento en detrimento del resto de operadores alternativos. Ni con la cuota de Euskaltel compensa esta tendencia actual de la que tenía en el primer trimestre de 2020, como muestra también el siguiente gráfico.
MásMóvil ha ganado en el segundo trimestre de 2021 -último dato publicado- un 50% de las altas netas del sector sin los tres grandes, mientras que un año antes había sumado el 76%. Ni siquiera sumando las de Euskaltel alcanzaría la cifra marcada en 2020. En cambio, los otros operadores han alcanzado la cifra del 38% frente a un 15% de un año antes.
Los datos muestran cierto agotamiento en el modelo de negocio de la operadora, propiedad de fondos de inversión que buscan el enriquecimiento rápido para vender y embolsarse los beneficios. El modelo de crecimiento rápido en clientes a base de ofertas muy competitivas pero sin grandes inversiones en redes -aprovechando la regulación española que le permite alquilar la de otras compañías, Orange principalmente-, salpicado de compras de otras operadoras más pequeñas, genera una alta deuda.
Por eso, la única solución posible que ven expertos del sector para MásMóvil es realizar otro movimiento que, tras la compra de Euskaltel, pasa por la venta a algún gigante del sector o una fusión con Vodafone.